Mi camino hacia una realidad en constante cambio
por María Soledad Aguilar
Ser un niño o una niña que vive en esta sociedad en red, líquida y en constante cambio. A veces puede ser un poco confuso, ¿verdad? ¿Qué nos pueden decir los niños sobre su realidad?
Aquí estoy, navegando en las olas de esta realidad y tratando de encontrar mi lugar en este mundo tan conectado
Verán, vivimos en una sociedad en red, donde todo está interconectado a través de Internet. Tengo acceso a una gran cantidad de información y puedo comunicarme con personas de todo el mundo con solo hacer clic en un botón. Es increíble cómo la tecnología ha transformado la forma en que vivimos y nos relacionamos. Pero a veces, tanta conexión puede hacer que me sienta abrumado. Es importante aprender a filtrar la información y discernir lo que es relevante y confiable. EN ESTE MUNDO HAY QUE SER REFLEXIVO.
Además, vivimos en una sociedad líquida, donde todo parece ser fluido y cambiante. Las cosas van y vienen rápidamente, las tendencias van y vienen, y a veces es difícil mantenerse al día. Pero en medio de todo esto, trato de recordar quién soy y qué me hace único. Busco mis propios intereses y pasiones, sin dejar que las modas o las opiniones de los demás me definan por completo. Descubro lo que me apasiona y lo persigo con determinación, incluso si eso significa nadar contracorriente. EN ESTE MUNDO HAY QUE SER VALIENTE.
En esta sociedad en constante movimiento, también enfrento desafíos y obstáculos. Puede ser difícil encontrar mi lugar y encajar en un mundo tan diverso y cambiante. Pero he aprendido que es importante tener confianza en mí mismo y en mis habilidades. No tengo que seguir la corriente, puedo crear mi propio camino. Aprendo de mis fracasos y los convierto en oportunidades de crecimiento. EN ESTE MUNDO HAY QUE SER CREATIVO.
Como niño en esta sociedad en red, líquida y en constante cambio, también tengo la responsabilidad de utilizar la tecnología de manera segura y responsable. Aprendo sobre el respeto en línea, la privacidad y la importancia de ser amable y respetuoso con los demás, tanto en línea como fuera de ella. Entiendo que mi comportamiento en línea puede tener un impacto en los demás y trato de ser consciente de ello. EN ESTE MUNDO HAY QUE SER MÁS HUMANO.
En resumen, ser niño en esta sociedad en red, líquida y en constante cambio puede ser emocionante y desafiante al mismo tiempo. Aprendo a aprovechar las oportunidades que me brinda la tecnología, a mantenerme fiel a mí mismo en medio de las corrientes cambiantes y a enfrentar los desafíos con valentía. Aunque el camino pueda ser incierto, estoy decidido a encontrar mi voz y dejar mi huella en este mundo en constante evolución.