¿Cómo preparar a las nuevas generaciones para un mundo incierto?
por María Soledad Aguilar
La "sociedad del riesgo" es un concepto desarrollado por el sociólogo alemán Ulrich y se refiere a una sociedad en la que las incertidumbres son cada vez más centrales en la vida cotidiana y las instituciones de nuestra sociedad.
El riesgo se convierte en una preocupación central en una sociedad que está en constante cambio y que se caracteriza por la incertidumbre y la falta de previsibilidad. Además, la sociedad del riesgo se caracteriza por una creciente complejidad y globalización, lo que hace que los riesgos sean más difíciles de prever y gestionar.
La sociedad del riesgo tiene implicaciones importantes para la educación, las infancias y juventudes actuales. La educación tiene un papel fundamental en la preparación de los jóvenes para enfrentar esta incertidumbre y en ayudarles a desarrollar habilidades y competencias para tomar decisiones informadas y responsables. La educación debe incluir no solo la adquisición de conocimientos y habilidades, sino también la formación de valores y actitudes que fomenten el respeto, la empatía y la responsabilidad social.
Además, en la sociedad del riesgo, es importante que la educación fomente el pensamiento crítico y la capacidad de análisis, para que los estudiantes puedan evaluar la información que reciben. Esto implica no solo enseñar habilidades y conocimientos específicos, sino también fomentar la creatividad, la curiosidad y la capacidad de aprender de manera autónoma.
Por otro lado, la sociedad del riesgo también plantea desafíos para la educación en cuanto a la gestión de los riesgos en sí mismos. Como adultos en contacto con estas infancias y juventudes podemos caer en el error común de crear burbujas anti riesgos, anti incertidumbres, pero ¿qué tanto van a estar preparados nuestras niñas, niños o adolescentes a la sociedad en la que les ha tocado vivir?
La escuela debe ser un espacio seguro y protector, pero también debe fomentar la autonomía y la libertad de los estudiantes. Es necesario encontrar un equilibrio entre la protección y la libertad, y esto implica trabajar en colaboración con las familias y la comunidad para identificar y abordar los riesgos de manera efectiva y sobre todo para dotar los estudiantes de las herramientas que les ayude a entender, enfrentar y actuar responsablemente con la incertidumbre de su entorno.
La sociedad del riesgo también tiene implicaciones importantes en la forma en que se concibe la educación y el papel de la escuela en la sociedad. En la sociedad del riesgo, el conocimiento y la información están en constante cambio, lo que hace que sea necesario que la educación se adapte y evolucione con ellos. Esto implica que la educación debe fomentar la capacidad de aprendizaje continuo y la adaptación a los cambios, para que los jóvenes puedan desarrollar habilidades y conocimientos que sean relevantes y útiles en un mundo cambiante.
La sociedad del riesgo plantea la necesidad de repensar la educación y la forma en que se concibe el aprendizaje. La educación no puede ser vista simplemente como un proceso de adquisición de conocimientos y habilidades, sino como un proceso de desarrollo integral, que les permita enfrentar los desafíos del mundo de manera responsable, crítica y creativa. La educación debe ser vista como una herramienta clave para la construcción de una sociedad más justa, equitativa y sostenible en la sociedad del riesgo.