La importancia de la primera habitación
por María Soledad Aguilar
Crear una habitación organizada, interesante, segura y que invite a la exploración y al descanso en los momentos que lo requieran; pero cuidado, no se trata de crear un ambiente sobre-estimulante que les llegue a agotar.
Los niños y niñas absorben todo lo que les rodea en su ambiente, sus sentidos están despiertos y en constante aprendizaje por ello son receptores sensibles hacia los colores, sonidos, texturas y aromas y si a esto sumamos que sus entornos significativos constituirán su primera fuente de estética, una vez más vemos que nada es aislado, todo es aprendizaje.
Ver la habitación desde la perspectiva del niño o niña nos hará sensibles a sus necesidades para construir un espacio significativo:
Al principio, los rostros familiares serán el estímulo más importante para los bebés; sin embargo, pronto se interesan por los objetos cercanos que los pueden enfocar y después se emocionan y es bueno estimularlos con objetos más alejados y en movimiento. Los móviles interesan mucho a los bebés, una buena alternativa es conseguir móviles con objetos intercambiables que estimulan el interés y curiosidad.
Cuando empieza el movimiento independiente en los niños y niñas es buena idea poner posters o imágenes de ilustraciones o pinturas de diferentes autores, esto estimulará su interés estético, ampliará su pinacoteca personal y tendrá experiencias visuales estimulantes más allá de la imágenes y caricaturas comerciales que los medios le presenten.
La música o la exposición a sonidos naturales o instrumentales sin la necesidad de voz a un volumen adecuado que sirva tan sólo para crear un ambiente, ayuda mucho a generar un espacio seguro, tranquilo que apoyará en procesos de sueño y emociones.
Los juguetes pueden que empiecen a acumularse, es importante ir rotando en vez de exponerles a todos a la vez, esta estrategia ayuda a mantener el interés en el entorno por el factor novedad y a mantener el orden como parte de la estética de la habitación.
Cuando la cuna se cambia por cama, muchos especialistas indican que una cama al ras del suelo estimula la independencia y genera un entorno adecuado a la talla de los niños y niñas para que sienta el espacio suyo, dónde pueden moverse y sentirse seguros.
Foto de portada: Freepik